Con la llegada del invierno llega el frío, y con él la nieve a una buena parte de nuestras carreteras. Muchos conductores no estamos acostumbrado a conducir nuestros vehículos con estas condiciones adversas, por ello aquí van una serie de consejos fáciles y útiles para evitar males mayores.

«Más vale prevenir que curar»

Siguiendo al refranero español, cuando vayamos a realizar un viaje debemos consultar la información meteorológica, el estado de las carreteras (puertos cerrados, transitabilidad…) y valorar la necesidad de realizar el desplazamiento que teníamos previsto si las previsiones no auguran nada bueno. Las carreteras secundarias son las más peligrosas, si no podemos evitarlas, precaución extrema. Podemos consultar las web de la DGT y Aemet.

Ganaremos tiempo y males mayores dejando el desplazamiento para el día siguiente.

El vehículo debe estar a punto

Debemos asegurarnos de que nuestro vehículo está en condiciones de circular en cualquier época del año, especialmente cuando realicemos un viaje, y si las condiciones meteorológicas son adversas, como una nevada, debemos revisar:

  • Neumáticos: Con la presión correcta de inflado, sin cortes, deformaciones… y con una profundidad mínima recomendable de la banda de rodadura de al menos 2 mm. Lo ideal para viajar por zonas con bajas temperaturas o donde nieve con frecuencia es tener unos neumáticos de invierno, siendo interesante valorar su utilización de manera regular durante todo el invierno en la zona norte de España, Galicia, Castilla y León, País Vasco o Asturias, y también en regiones más montañosas de cualquier parte de la península.
  • Escobillas: Que limpien bien y que el líquido del limpiaparabrisas contenga propiedades anticongelantes.
  • Luces: Que no tengamos ninguna fundida, además de faros e intermitentes limpios que no reduzcan la visibilidad.
  • Frenos y amortiguadores: Aumentarán la distancia de frenado si están en mal estado.
  • Los repuestos obligatorias en buen estado: Chaleco, triángulos, rueda de repuesto (en buenas condiciones y bien inflada) y herramientas para cambiarla o sistema alternativo homologado.
  • Batería: Es la primera causa de intervención de la grúa en invierno.

Conducción en caso de nieve

  • Llevar encendidas las luces de cruce, antiniebla delantera y en caso de fuerte nevada, el antiniebla trasero, obligatoriamente. Las luces nos ayudarán a ver y ser vistos.
  • Evitar que se empañen los cristales, para no perder visibilidad. Debemos tener visibilidad sobre todos ellos.
  • Iniciar la marcha con la relación de velocidad más alta posible pero a la vez adecuada y compatible con la seguridad. Evitar la 1ª velocidad.
  • En tramos en pendientes ascendientes o llanos, circular con marchas altas, con el motor poco revolucionado. En cambio, en pendientes descendentes utilizar marchas cortas, para que actúe el freno motor, evitando el uso del freno de servicio.
  • Reducir la velocidad, circulando lentamente, frenando y acelerando suavemente, sin movimientos bruscos del volante.
  • Aumentar la distancia de seguridad con el vehículo de delante porque se necesita más distancia para detener el vehículo.
  • Es conveniente seguir las marcas dejadas por otros vehículos en caso de una nevada,  solamente si no se ha producido hielo en ellas porque el hielo es muy deslizante.
  • Entrar en las curvas de tal forma que no sea necesario frenar durante su desarrollo.
  • No adelantar a la máquina quitanieves cuando esté realizando trabajos en la vía. Y si se adelanta a un vehículo bloqueado por la nieve, asegurándonos que se puede realizar sin peligro y valorando el estado de la vía delante de este vehículo.
  • Tener especial cuidado si se circula por un lado sobre suelo seco y por otro sobre suelo con nieve porque la dirección del vehículo puede verse afectada peligrosamente.
  • Limpiar periódicamente la nieve que se acumula en el guardabarros y que puede obstaculizar el giro de las ruedas.
  • Si no se dispone de neumáticos de invierno, colocar las cadenas, al menos en las ruedas motrices, cuando sea obligatorio su uso o cuando esté la vía cubierta de nieve. Para colocar las cadenas salir de la vía a un lugar de fácil acceso, evitando provocar un accidente.
  • Utilizar gafas de sol cuando salga este tras la nevada, porque los rayos del sol se reflejan sobre la nieve, molestando al conductor en gran medida.

Y si no podemos conducir por el mal estado de la vía:

  • Inmovilizar el vehículo  fuera de la vía, a un lugar de fácil acceso, para evitar ser un obstáculo para los demás vehículos, dejando vía libre a las máquinas quitanieves.
  • Orientar las ruedas en línea recta, para cuando tengamos que iniciar la marcha.
  • Disponer de combustible suficiente, batería del teléfono móvil cargado, ropa de abrigo, comida y bebida.
  • Levantar los limpiaparabrisas para que no peguen al cristal.

 

Fernando Solas
Técnico de PONS Seguridad Vial